jueves, 29 de marzo de 2007

Herencia

Jugando al poeta le arrojo una piedra al bosque
Tendida en la hierba dormita la piedra. Me quito los zapatos y escribo.
En las afueras de un árbol , un viejo cejijunto añade tabaco a su pipa.
-La amenaza de los pies descalzos tensa al río :- me dice inopinadamente - yo aprendí a nadar mirando el agua, haciéndome parte de su calma.

1 comentario:

Astrid dijo...

"la amenaza de los pies descalzos tensa al río"... pero qué bonito!